“¿A qué se dedican las UCS? No actúan en manifestaciones ya que el orden público es competencia del Cuerpo Nacional de Policía y porque el PP jamás les dotó de medios para trabajar en grandes concentraciones de personas ni para repeler un ataque. Algunos de ellos dicen que colaboran con los distritos. Mentira! Jamás les he visto ayudando a un compañero en apuros. La manifestación ha sido convocada por el sindicato CPPM, un sindicato pro PP que vivía muy bien durante sus gobiernos”.
Es un pasaje de una
carta abierta escrita por un agente municipal de Madrid tras el acoso al concejal de Seguridad protagonizado este martes por unos 300 policías municipales. Este es el texto:
“Yo soy policía municipal de Madrid y me avergüenzo de la “manifestación” que ha tenido lugar contra el gobierno presidido por Manuela Carmena. No solo estoy en desacuerdo con el motivo de dicha convocatoria, ya que no creo que hubiesen razones objetivas para su celebración, sino que además pienso que estos compañeros han equivocado totalmente el modo de protestar, utilizando la misma violencia que tanto critican.
Gracias a Dios, somos muchos los que pensamos diferente. Somos muchos los que hoy nos solidarizamos con nuestro concejal agredido.Voy a tratar de explicar cuanta crueldad ha tenido este gobierno “anti-policía” con nuestro amado cuerpo y los puntos clave que han originado este enfrentamiento:
Nos han devuelto, sin ninguna obligación legal, el 25% de la paga extra que el PP nos robó en 2012. A finales de este mes nos devuelven, otra vez sin ninguna obligación legal y sin que el gobierno central actúe en la misma línea, el 50% restante de la misma. Están luchando para reintegrarnos el exceso de jornada que Ana Botella incrementó durante el verano. Tampoco tienen ninguna obligación legal de hacerlo. Es más, nadie se imaginaba que vería jamás ese ingreso en su nómina. Hablamos de 600 euros por policía.
Nos han consolidado las ayudas sociales que el PP nos arrebató: guarderias, estudios, odontología, optometría… Aún recuerdo cuando estos “pro policías” querían hurtarnos nuestros días de libranza e imponernos un convenio abusivo e inmoral. El miedo del Madrid Arena y la presión de los Juegos Olímpicos les hizo recular en el último minuto.
Han eliminado un curso de inglés inútil e inservible que Ana Botella nos impuso durante 102 horas al año. La mayoría lo superaba instalando un pequeño programa que repetía una secuencia mientras dormían. Han destruido el contrato por el que Ana Botella pretendía alquilar 636 patrullas (renault scenic básicos) a 58.000 euros cada uno, durante 4 años. Un robo a mano armada.
Posteriormente el Ayuntamiento ha realizado uno nuevo en el que ha comprado 130 Renault Scenic (más que suficientes), rotulados, con emisora, seguro, renting, mampara, rotativos, etc., por 20.000 euros cada uno. El ahorro es evidente. Estos son de color blanco porque así lo ordena la legislación europea.
¿Y qué ha hecho Carmena con el dinero ahorrado? Ha encargado 5.000 chalecos antibalas, valorados en 700 euros, para cada policía. ¿Qué hizo Ana Botella para abordar el problema de la falta de chalecos? Compró 7.000 camisetas interiores, de peor calidad que las básias del Zara (sólo somos 2.500 policías que trabajamos en la calle), para que pudiesemos utilizar, encima de ellas, los chalecos anti balas mugrientos que hay en el maletero de los patrullas. Lógicamente fueron a parar directamente a la basura. ¿Cuánto costó cada camiseta? 37 euros. 37 x 7.000 = mucho dinero robado.
Durante el gobierno del PP, cada policía tenía asignado 1.500 euros anuales para recambios de vestuario. A ver si alguien conoce a uno solo que piense que se han gastado en él tan solo 50 euros. Han cerrado tres bares municipales donde los policías desayunaban y merendaban.
¿Por qué lo han hecho? Porque los beneficios de estos (50.000 euros anuales) iban a parar al bolsillo de algún/os particular/es. Utilizaban dependencias municipales (pagadas por los madrileños) y policías municipales (pagados por los madrileños) para enriquecerse individualmente, sin pagar impuestos, alquieres de locales, ni declarar venta alguna, etc.
Algunos policías han asegurado que estos beneficios se empleaban para comprar las coronas de los compañeros fallecidos. Y así fue en una pequeñísima parte. Este gasto ha sido asumido por la Corporación, por primera vez en la historia.
El Ayuntamiento ha tratado por todos los medios de que los aspirantes a policías, que superaron su oposición hace meses, pudieran formarse en una academia situada en la ciudad de Madrid. La señora Cifuentes ha preferido que lo hagan en Ávila, cobrándoles la manutención, el alojamiento, la lavanderia, etc. Gracias al PP, cada alumno cobra únicamente 300 euros mensuales.
Gracias al PP, que no ha convocado oposiciones para policía durante 7 largos años, mientras la gente se jubilaba, falta personal. Las Unidades Integrales de Distrito, la base de la Policía Municipal de Madrid, están desbordadas. Sus integrantes no pueden librar lo que les corresponde porque las necesidades del servicio se lo impiden, y siendo tan pocos, se juegan la vida frecuentemente.
El Ayuntamiento, lógicamente, ha decidido reubicar al personal de ciertas unidades espcializadas para dar apoyo a los distritos. Este es el caso del GAZ, unidad que prestaba servicio de paisano para perseguir el botellón (600 euros de multa) y la venta ambulante.
Yo no digo que no sean temas importantes, porque para el que los sufre pueden ser capitales, pero creo que primero han de atenderse los accidentes, los incendios, los auxilios a personas, las reyertas, las violencias de género, etc. Una cosa es priorizar y otra muy distinta dejar de perseguir infracciones.
Pero sin duda el tema que ha desatado la ira del sector más radical del cuerpo, ha sido el siguiente: el Ayuntamiento pretende cambiar las UCS (antidisturbios municipales) por otra unidad similar que sea efectiva y reubicar mientras a sus agentes en los distritos, donde hacen mucha falta.
¿A qué se dedican las UCS? No actúan en manifestaciones ya que el orden público es competencia del Cuerpo Nacional de Policía y porque el PP jamás les dotó de medios (escopeta franchy) para trabajar en grandes concentraciones de personas ni para repeler un ataque. Gracias a Manuela Carmena ya no desahucian a familias.
Algunos de ellos dicen que colaboran con los distritos. Mentira! Jamás les he visto ayudando a un compañero en apuros. Dicen que hacen controles en la Cañada Real. ¿Y de qué sirven? El hecho de que allí se venda y se consuma droga es una decisión política. Las Barranquillas desaparecieron de la noche a la mañana por una decisión política.
Además del “sin sentido” de su existencia, a los componentes de las UCS les falta preparación. Están a años luz de la UIP en cuanto a técnicas de intervención. Físicamente, hay compañeros muy aptos, pero hay muchos otros con sobrepeso y/o edad avanzada. Compañero, despierta! Para que ellos vivan bien, TÚ debes renunciar a tu libranza y hartarte a trabajar.
Como dato añadiré que la manifestación fue convocada por el sindicato CPPM. Un sindicato pro PP, que vivía muy bien durante sus gobiernos, que nos vendió de manera vil y rastrera durante las últimas negociaciones con la Administración, y que ganó las elecciones regalando un Ipad a todo el que le votaba”.