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Emilio León
"Aprovecho para decir que se tienen que quedar con mi nombre. Me llamo Emilio León. Yo no robo. Han robado a mis padres, y lo mismo que se han quedado con el dinero de mis padres quiero que se queden con mi nombre."
Así me dirigía a Manuel Menéndez el pasado 27 de junio de 2013, en la primera junta de accionistas de Liberbank, donde nos manifestamos contra la estafa de la deuda subordinada que afectó a miles de familias asturianas. El próximo lunes día 15 de febrero, Menéndez comparecerá en el Parlamento asturiano por primera vez desde 1995, cuando fue nombrado presidente de Cajastur, para responder a las preguntas de Podemos. Han pasado 21 años para que alguien le pida cuentas de su gestión en sede parlamentaria y ya han pasado tres años desde el mayor atraco de nuestra historia.
Aquí tenéis el discurso íntegro y el vídeo que pudimos recuperar de aquella junta que se convirtió en un verdadero juicio a los responsables del austericidio: "A pesar de espaldas a ustedes me alegro de que puedan vernos la cara. Hemos realizado un viaje bien largo para que el presidente de esta entidad vea a las personas que han sufrido el mayor robo de la historia de Asturies. Es una vergüenza que no hayamos podido asistir a esta sala cuando aquí hay gente que ni siquiera es accionista. Han tenido que pagarle la noche a algunos de los directores de sucursal para llenar esta sala y que la gente no pueda denunciar lo que está sucediendo.
Queremos dejar bien claro que se ha cometido el mayor robo de la historia de Asturies. No ha sido ni “el Solitario” ni “el Lute”, ha sido gente con maletín corbata, traje, gomina y que colecciona sellos de Suiza. Gente que no ha tenido escrúpulos en venderle un producto como la deuda subordinada y las participaciones preferentes que apenas podía leer la letra pequeña, mucho menos comprender lo que estaban contratando. Esa es la gente que ha venido aquí a pedir explicaciones, gente brava, gente con ganas de dar la pelea, gente que no viene a mendigar porque solas damos pena pero juntas vamos a dar miedo.
Exigimos no solamente que se devuelva el dinero de todas las personas que han sido estafadas. Queremos además que no se produzca ni un solo despido. Somos personas solidarias, no queremos que nos devuelvan el dinero a cualquier precio. Queremos que no se produzca ni un desahucio más con dinero público de una entidad intervenida. Este presidente ha soportado una huelga de hambre a la puerta de la Oficina principal de Cajastur sin inmutarse. No queremos, por supuesto, que se cierren sucursales, que en Asturies son imprescindibles para mantener la vertebración territorial. La gente tiene derecho a tener una sucursal cerca de casa, pero no una sucursal en la que le miedo entrar porque le vayan a robar la cartera.
Queremos que se realice una auditoría. Queremos que se explique cómo es posible que esta entidad que presumía de ser solvente se encuentre en una situación de descapitalización que haga imprescindible meter la mano en el bolsillo de los pequeños ahorradores, en el bolsillo de los trabajadores y de la gente que a duras penas puede pagar la hipoteca. Esta entidad no se ha venido a pique porque alguien dejase de pagar la hipoteca a final de mes. Esta entidad se ha venido a pique por respaldar las políticas inmobiliarias, el urbanismo depredador de los consistorios respaldado todo esto por un Consejo de Administración integrado por representantes de los principales políticos, PSOE y PP.
Queremos que se den cuentas, no sólo venimos a pedir que se nos devuelva nuestro dinero. Venimos a exigir justicia, denunciar productos tóxicos como las cláusulas suelo, deuda subordinada y todo aquello que se les ocurra que puedan vender en el futuro. No vamos a aceptar las politicas de austeridad. No vamos a aceptar que nos endosen una deuda que ni pedimos ni disfrutamos. Estamos aquí para exigir que paguen de su bolsillo aquellos que se llevan 1000 € al día o, como el caso de Santiago Argüelles o Agustín Iglesias Caunedo, 90.000 € anuales por asistir a reuniones. No por lo mucho que saben de economía sino por lo bien que saben cerrar la boca.
La gente de Asturies -y de otras comunidades que estamos aquí- vamos a exigir cuentas. No vamos a permitir que sigan durmiendo tranquilos aquellos que nos robaron el sueño.
Aprovecho para decir que se tienen que quedar con mi nombre. Me llamo Emilio León. Yo no robo. Han robado a mis padres, y lo mismo que se han quedado con el dinero de mis padres quiero que se queden con mi nombre.
Venimos de Asturies donde el fraude fiscal supone más de 1600 € anuales a los contribuyentes. Las cuentas presentadas en este punto están completamente falseadas. No dan cuenta de la auditoría real, no sólamente del balance contable, de la situación que vivimos en Asturies con más de 100.000 parados que sufren como la impunidad de los dirigentes de estas entidades bancarias.
En Cajastur habían depositado su confianza además de su dinero. Ahora se encuentran que tienen que venir a mendigar que se les devuelva su propio dinero. La gente trajo a Cajastur contante y sonante, dinero del banco de España, no estampitas del niño Menéndez. Estamos aquí para denunciar que la Troika no sólo está en Bruselas. La Troika es la Comisión Nacional de Valores, el Banco de España, es también el FROB.
Esta es la gente que está respaldando las políticas capitaneadas por Manuel Menéndez y un Consejo de Administración que nos presentaba la privatización de Cajastur como la salida a la situación que supuestamente crítica y que, nada más se privatizada, sale a bolsa se desploma, tiene que ser intervenido y tienen que pedir dinero público.
No vamos a aceptar un canje que es un robo, que es una quita encubierta porque el valor de las acciones ha caído más de un 60 % nada más salir, y no vamos a aceptar un Plan de Fidelización que es un nuevo engaño a gente que lo que merece que es se les pida perdón por haberles robado una vida de trabajo, de sufrimiento para poder acumular y tener algo de dinero en los momentos más duros de esta crisis. Cuando más lo necesitábamos, cuando nuestros mayores más requerían de su dinero ahorrado es cuando se encuentran…
Por último. No vamos a permitir que sigan viajando en coches de lujo y reuniéndose en el Hotel de la Reconquista mientras nosotros tenemos que patear la calle para recuperar nuestros ahorros. Téngalo en cuenta, van a tener que empezar a reunirse pero en el “Hotel Villabona”, la cárcel de Asturies.
Audio íntegro: https://www.box.com/s/obs37805zvnix92h39go
