Familias y exalumnos defienden a los Maristas y rodean el colegio con una cadena humana
Un centenar de alumnos, exalumnos, padres, madres y exmaestros han rodeado esta tarde con una cadena humana el colegio Maristas de Sants – les Corts, en Barcelons, para exigir respeto por el centro de enseñanza religioso en el que varios profesores han sido acusados en los últimos días por exalumnos de abusos sexualesque habrían realizado durante años.
Hasta el momento, cuatro profesores y un monitor de comedor han sido denunciados en las últimas semanas por haber abusado o agredido sexualmente de decenas de niños. Pese a las denuncias, los asistentes a la protesta han asegurado que se esta llevando a cabo una verdadera campaña de “desprestigio” contra la institución.
Los manifestantes han exhibido una pancarta que rezaba ‘En apoyo a las víctimas y al profesorado’. Aun así, sólo se han escuchado reproches a los medios de comunicación y ninguna proclama en favor de las víctimas de abusos sexuales. Josep Castañer, un exalumno que primero llevó a sus hijos al centro y ahora a sus nietos, aseguraba esta tarde: “Se publican muchas cosas que no me creo, hemos venido a apoyar a la institución y al profesorado”, informa El País.
Uno de los padres incluso ha llegado a defender al exdocente y pedófilo confeso: “Benítez era buen profesor, nos duele lo que ha pasado porque el escándalo no es propio de Benítez, además nuestros hijos, que aseguran que nunca vieron nada extraño, son ingenieros mientras que los que le están denunciando no son nadie”.
Pilar Jansana, una madre, aseguraba que sólo se ha destapado un caso, “como pasa en otros colegios estamos muy tranquilos con la escuela”. La mujer no acaba de creerse que los cinco denunciados sean culpables. Una madre ha recordado, con orgullo, como en 2011 el “director no dejó acabar la clase a Benítez, en cuanto se enteró de lo sucedido lo echaron”.
Uno de los jóvenes llevaba un cartel que mostraba a todo aquel que pasaba por delante del centro: “No todos tenéis la culpa, todo lo que somos es gracias a vosotros”, en referencia a sus maestros. Tras minutos entrelazados se despidieron con un aplauso mostrando que la institución sigue unida pese a los “ataques”.
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